Me gustaba leer
el verde en tu espalda,
saborear la penumbra del disfraz.
Caerme,
solearme en esos ojos
que abducían vientres solares.
Me gustaba oír el no
de un si con estrías en la entrepierna.
Salirme del cero absoluto,
hasta congelarme
en un mañana sin ayer, ni hoy.
Me gustaba no tenernos,
y vomitarnos restos de corazón,
saber que no existíamos
en esa cama con dotes de balcón
y aún y todo
volarnos los sesos por no gemir…
Y pensar,
pensar que el silencio nos desviste mejor;
Yo con mis sueños de sadismos y chocolate,
vos con tus niños domados y tus cárceles de piernas abiertas...
1 estrías de entendimiento:
Querer y no querer y no saber qué es mejor.
Oxímorons de verdades, como siempre.
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