Día 35 o día feliz 3 o la primavera

El mundo de los idiotas en el hemisferio sur sonríe, el mundo de las causas prácticas se encuentra hoy en su apogeo inofensivo. Se enlazaran nuevas heridas, nuevos cíclopes tendrán alas y una lágrima roja como escudo al silencio, al resto de los días en que la otra parte del ser tampoco ha vivido.
En el mundo de los gestos esclavos sin bondad, un abrazo es un estigma a futuro corto, un segundo en la orbe de la meditación mundana es el desquicio, es la ira acumulada desgranada en un recuerdo peor.
Oraciones largas forman una antihistoria, dan golpecitos en la neurona inquisitiva del vacío no brindado. Yo sé que se mueven en paréntesis falsos, yo sé que la gente camina en senderos fáciles, yo sé que nadie se dispone a detenerse a contemplar cuando pueden correr por la ventana de los cuerpos sin puertas ni jardín. 
Niego el día en que nací, niego la primavera. Niego sentirme desnudo en este oscuro y retorcido inicio de abismos sentimentales. Quizá la culpa  de no saber crecer  me deje una flor no deshuesada y cuando nadie mire el invierno lloviendo una nostalgia una semana después sea el momento exacto en que el nulo hueco del Fede y su mariposa inventada empiecen a reír... personas sobran.