Día 49 o día infeliz 6 o mi Himalaya

Trepar y ser un árbol con huesos, caer, rodar con el secreto de la libertad en la punta de la lengua. Fingir ser real en nervioso escaparate altruista y convencer a cada viscoso de que el tiempo es solo tierra, mar y aire.
Que es calma la nieve en el alma, todos lo saben.Que es cotidiano crecer con restos de inmundicias adheridos en esa vertiginosa caída es algo estable, como tus piernas abiertas, como tus manos cerradas.
Ser tan alto hasta el silencio y tan claro como selenio en cristal de sangre. Ser esta especie de muerte en pie y aún y todo complacerse con pequeños placeres vitales y a su vez no existenciales.
Ser algo o no tener voluntad, socorrer el cuerpo en busca de una redención blanca. Ser este estúpido Himalaya y no dejar que nadie alcance ni la planta de este pie que nada aplasta... y si soy una cucaracha, y si soy el complejo de un error aún no cometido, quizá, y el bar, y un bar para escapar.